Las Cartas de Cristo
por Sergio Scabia em STUM WORLDAtualizado em 08/04/2020 11:35:00
Traducción de Teresa - [email protected]
Confieso que ya no esperaba, a los 66 años, pasar por una experiencia tan intensa y reveladora que me dio más impulso, determinación y coraje para divulgar de forma amplia, a través del STUM - y contando con tu preciosa e indispensable ayuda - a todos los que tengan el corazón y la mente abiertos, la Verdad sobre la Vida. La Verdad única que liberta, que cura, que permite vivenciar el Cielo aquí mismo en la Tierra.
Pese a las decenas de miles de textos, blogs e interactivos realizados hasta el presente en este Website, parecía faltar algo; cuando de pronto, a finales de 2011, descubrí aquello que era absolutamente fundamental llevar a tu conocimiento, Amiga/Amigo lector.
Fue la querida Diva Stael, de Curitiba, una de las primeras usuarias - que nos apoya y acompaña desde hace diez años -, y que incansablemente ha colaborado en el sostenimiento de este Sitio, quien me ha enviado un espléndido regalo de Navidad: un libro de tapas duras cuyo título, de inicio, llegó a preocuparme: "Las Cartas de Cristo". Por varias razones.
Aun viniendo de Diva, quien lo había leído y lo recomendaba, se trataba de una canalización, y mi mente desconfiada recordó enseguida tantos mensajes supuestamente recibidos de otras dimensiones, que, pese a estar muy bien formateados, distorsionaban la información y no traían el contenido correcto. Además, enseguida verifiqué que el nacimiento de las "Cartas" databa del año 2000, y aunque creía estar al tanto de todo lo que en términos de espiritualidad es relevante en Internet, nunca había leído nada sobre ellas.
Pese a ello, bastó comenzar la lectura para sentir inmediatamente una resonancia en mi ser que elevó mi vibración, desvendando una presencia amiga, firme, amorosa y cercana ofreciéndose, ayudando de manera incondicional con todo su conocimiento y sabiduría.
Feliz como un crío, llegué a la conclusión de que, aun habiendo sido traducidas a siete idiomas hasta el momento, "Las Cartas" representan algo que las grandes editoras temen publicar, tanto como temen las grandes religiones que llegue hasta el gran público.
De esta forma, no veo otra solución que hacer todo cuanto está a nuestro alcance para que, al menos en el Brasil - país único en términos de libertad religiosa y espiritualidad - donde conviven pacíficamente todos los credos, el mensaje, las enseñanzas, la verdadera historia de este Hermano iluminado lleguen, finalmente, a ser conocidas y transmitidas a los seres humanos que de verdad se hallen preparados y despiertos.
Sí, somos muchos, somos conscientes de nuestra fuerza innata, de nuestro linaje divino. Hemos venido buscando con foco y buen sentido la Verdad, la alegría en la Unidad, la felicidad en las experiencias personales reveladoras; advertimos la presencia de los Guías y de los Mentores; el viejo miedo ya no habita en nosotros, visto que el espacio que éste ocupaba antes ha sido colmado por el Amor Incondicional y por la bienaventuranza.
Un nuevo ciclo comienza para quienes, guiados por el corazón, adviertan que ahora ha llegado la hora. A partir de este instante, todos podemos tener en nuestras manos "El Instrumento", el manual completo para una existencia plena, próspera, consciente y llena de bendiciones.
Nunca antes había encontrado en un libro tantos términos de los que figuran en los textos de este Website y en los boletines. la Fuente, Somos todos uno, Conciencia Crística, Conciencia Universal, auto-conocimiento, despertar, Leyes Universales, Iluminación, Amor Incondicional, Luz, Cielo en la Tierra y otros, ratificando así el origen de las inspiraciones recibidas en tantos años de vida del STUM.
No estamos y nunca estuvimos solos, ya no somos almas oprimidas, pecadoras y "Las Cartas" vienen a reforzar los vínculos de la familia espiritual, formada por todos los que están en la misma sintonía; que no buscan la Verdad fuera, en las religiones, en las sectas, sino en su interior, en la introspección, en el silencio de la meditación, en la experiencia directa que no necesita intermediarios y que hace aflorar "habilidades místicas" innatas, sencillas y efectivas. Sí, hay una Conciencia Universal que nos ampara, protege, cuida de nuestra salud, de nuestro organismo perfecto, día y noche, sin cesar. Nuestro origen, como el de Jesús, es la misma Fuente del Ser, de donde manan todos los demás aspectos que necesitamos: intuición, alegría, inspiración, apoyo, soluciones puntuales y correctas, guía, socorro espiritual, maestrías y habilidades únicas.
El Prefacio y la Introducción nos cuentan algo de la historia, de las sincronías que el Universo produjo para que la obra pudiese ver la luz. Nos sugiere la importancia del contenido de los mensajes y no de la identidad del mensajero, una mujer de origen inglés, de 92 años de edad, lúcida y activa, que hasta hoy continúa recibiendo "artículos" de Cristo, que serán objeto de un nuevo libro. Destaca que debe formarse una fuerte conexión del lector con la Conciencia Crística (algo indescriptible que de hecho ocurrió conmigo), recomendando "ponderar" cuidadosamente las frases, a fin de entrar en la sintonía correcta de su sustancia, su significado más profundo. El mensajero abre más y más su relato acerca de toda su larga preparación y afinación para convertirse en un fiel portavoz de Cristo, en una cronología de cuarenta años llena de eventos, que es capaz de poner en destaque los aspectos humanos - y al mismo tiempo divinos - de una increíble y bellísima aparcería.
Nada hay de sobrehumano, de misterioso, de pirotécnico. Todo es a la medida del hombre; sublime, casi tangible, como lo es la vida, incluso llevando al canal a un estado de "paz y alegría interior".
Todo está contemplado de manera clara, aunque a veces exija concentración y hasta meditación para llegar a la comprensión profunda de las cuestiones. No hay dogmas, pruebas de fe, tradicionalismos de ningún tipo.
En las "Cartas" encontramos - además - técnicas excelentes para mejorar nuestra esencia, socorriendo a tiempo nuestra alma tan maltratada y ahora definitivamente rescatada de la oscuridad, de la hipocresía, de la manipulación y de la ignorancia.
Aspectos más prácticos, tales como la educación de los hijos, el Ego, las relaciones afectivas y sexuales, se tratan de forma clara y amorosa, proporcionando la esperanza de un nuevo y magnífico horizonte de realización plena también para las parejas.En este link tenemos dos fragmentos en destaque de la Carta 1
Procura sentir el flujo de las palabras transformándose en luz mientras se apoderan de tu ser. Es de veras confortador comprobar finalmente la realidad de la naturaleza humana de Jesús, con su nacimiento del vientre de María igual al de cualquier niño, y su niñez traviesa y rebelde. "yo no era un crío santo" ha dicho, y afirma, sin embargo, algo liberador que nos hace respirar profundamente varias veces:
La verdad con respecto a mi estado humano, por común acuerdo de mi discípulos, fue callada para dar mayor creencia a mi supuesta 'Divinidad' y ministerio.
Según el Evangelio se decía de mi que fui el 'Único Hijo de Dios'. ¿Por qué entonces me referiría a mi mismo frecuentemente como el 'Hijo del Hombre'? Hice estas afirmaciones específicamente para contrarrestar las creencias extendidas sobre mi 'divinidad' y para grabar en las mentes de la gente del mismo origen físico que ellos. Mi intención fue que entendiesen que lo que podía hacer yo, también lo podían hacer ello si simplemente tuviesen mi conocimiento y siguiesen mis instrucciones para pensar y actuar con acierto
Aún respecto de su actitud siempre serena, coherente, y de su legado espiritual:
Fui un rebelde contra las tradiciones Judaicas existentes, y a causa de que, cuando salí de mi estancia de seis semanas en el desierto, vi una forma mejor de pensar e vivir e intenté transmitir, con poco éxito, mis conocimientos a mis compañeros judíos.
Mis discípulos e Pablo construyeron sus propios conceptos de 'sagradas creencias' de lo que querían conservar de mi vida y mis enseñanzas. Tan solo enseñaron y consolidaron los conceptos que consideraban valiosos para el pueblo -Judíos y Gentíos, por igual-, los de aquel tiempo e del futuro. Por consiguiente destilaron lo que podían usar y 'soltaron' la mayor parte de lo que yo llamaba los 'secretos del Reino de Dios' porque nunca habían sido comprendidos.
Tampoco los encontraron relevantes en la creación de una nueva percepción del 'Divino' - el 'Padre'
Y paro por aquí, todo lo que viene presentado en el libro es absolutamente enriquecedor, esencial y profundo.
Podrás leer online todas las otras 8 cartas:
Carta 2
Carta 3
Carta 4
Carta 5
Carta 6
Carta 7
Carta 8
Carta 9
Y, por fin: Cómo Meditar en la Carta 8 pág. 25
Quiero recordar aquí que no se trata en absoluto de un libro de auto-ayuda, sino que Jesús pone énfasis en técnicas diversas, en particular la meditación, por su importancia en la liberación de fardos emocionales y mentales; para la comprensión de las propias cartas y además para alcanzar un estado de unión sutil con lo Divino, de percepción de los aspectos más profundos de la existencia, para llegar al estado de samadhi (nirvana), a la fusión con el Todo, a la verdadera bienaventuranza. Haz la prueba, ejercítate con ahínco silenciando tu mente; procura memorizar la oración del texto y ve acompañando las instrucciones. Es lo que estoy haciendo a diario y lo recomiendo de todo corazón.
Confieso que llevo mi ejemplar a todas partes, desde mi cuarto de aseo hasta la consulta del dentista. Lo tengo siempre a mano, en la mesa de trabajo o en la mesilla de noche y quizá es el libro más importante que haya leído hasta el momento. Estoy en paz, me siento motivado y feliz como nunca antes.
Deseo que tu corazón sea tocado amorosamente por la energía del libro, que te encuentres en él, que puedas progresar en todos los sentidos, hacia una nueva y placentera comprensión de tu existencia.
Agradezco aquí a los queridos y pacientes Guías y a toda la pandilla que permite que este Website exista: Rodolfo, Sandra, Teresa, Marcos, Anderson, Ian, Lidiane. ¡y Tú!
¡Sí, somos uno solo! ¡El momento es ahora!
Namastê (El Dios que existe en mí saluda al Dios que habita en Ti).
