Claves para desarrollar el amor propio
por Silvia Malamud em STUM WORLDAtualizado em 30/10/2015 09:55:16
Traducción de Teresa - [email protected]
Las personas deberían ser incomprables e impagables, porque cuando se venden por miedo a perder al otro, negando sus deseos más íntimos, negando la propia vida por satisfacer los deseos de las parejas, los amigos o los familiares, y lo peor, negando sus importantes límites personales, se convierten en rehenes, entregando su bien mayor, que es la propia alma. Y cuando a cambio reciben migajas de afecto como recompensa, aun así imaginan que están recibiendo algún tipo de paga por haber sido “buenecitos”… Craso error.
Todo esto forma parte de un delirio compartido sólo con aquellos que están envueltos en esta clase de enfermedad psíquica. Por tanto, cuanto antes despierten, más vida real pulsará y más oportunidades para vivir mejor surgirán. Queda la propuesta.
Y si por casualidad sientes necesidad de ayuda con el fin de facilitar la salida de escenarios difíciles como este, confía y búscala. Tú mereces amarte y ser amada en la medida correcta. La recompensa de todo eso es una sensación de libertad inequívoca. Es que seas libre. Libre para ser quien de verdad tú eres, lo cual es impagable.
Libertad es saber quién tú eres, identificar quién se es, y no negar la esencia, por el contrario, es ir a favor de ella y no nadar en contra. Muchos están tan acostumbrados a entregar sus almas en la ilusión de que serán aceptados, que ni siquiera se dan cuenta de cuánto hay abdicado ya de sí mismos. La curación consiste en comenzar a decir: Oye mundo, yo estoy aquí y yo no voy a abdicar de mí misma por ti. Algunas veces yo podría incluso ceder, pero será por elección, jamás por miedo. Decir no a otros es decir que yo estoy aquí, que yo tengo sentimientos y que estoy diciéndome un sí a mí misma, es confirmar que se tiene amor propio.
*Recuerda que nada sustituye la acción y la fuente de cualquier acción está en la percepción lúcida del lugar donde estamos, en el deseo de cambiar de vida para mejor, y en la intención…
Nota: Si bien este texto esté escrito para lo femenino, vale de igual modo para el universo masculino.
