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Júpiter: el Regente de 2007

por Graziella Marraccini em STUM WORLD
Atualizado em 03/12/2006 19:02:37


Traducción de Teresa - [email protected]

Al acercarse el inicio del próximo año de nuestro calendario, los astrólogos siempre procuran ofrecer orientaciones, con objeto de ayudar a las personas a que entren en sintonía con las energías cósmicas que van a regir el año en cuestión. Muchos son los métodos usados y todos ellos son válidos, por esa razón existe gran libertad de elección y cada cual optará por aquel que más le agrade intuitivamente.

La astrología, así como otras muchas ciencias, permite varias interpretaciones que dependen de tradiciones diferentes. La Astrología Hindú es diferente de la China que es diferente de la Musulmana que es diferente de la Occidental. Pero todas son válidas y todas transmiten conocimientos milenarios de sabiduría y tradición y por esa razón pueden servir de orientación. Intentaré aclarar algunos puntos respecto de esto y dejaré que tú, lector, sigas después tu propia intuición y tu corazón para entrar en conexión con aquel planeta o energía que esté más en sintonía contigo en este momento y especialmente en el cambio de Año.

¿Cómo descubren los astrólogos cuál es el regente del próximo año? Los más esotéricos buscan en los antiguos caldeos este conocimiento. Ellos se basan en la denominada “Estrella de los Magos”, una estrella de siete puntas donde son colocados el Sol, la Luna y otros cinco planetas (aquellos que son visibles a simple vista y que eran los conocidos en la antigüedad). La secuencia en que son colocados los planetas no está clara, pues no sigue el orden lógico (de alejamiento de los planetas en relación al Sol o en relación a la Tierra, por ejemplo) y no vamos a esclarecerlo en este artículo.

Los Caldeos utilizaban las regencias en la secuencia, contando el AÑO CERO siempre como siendo el Año regido por el Sol. ¿Y cómo encontrar el Año Cero? Simplemente dividiendo el año en cuestión por el número 7 y obteniendo un número de “resto”. Este resto es el número correspondiente al planeta regente del Año. Cuando el resto es “cero” será entonces un año SOLAR que iniciará nuevamente un ciclo. El último Año Cero fue 1981. Así, haciendo ese cálculo, 2007 nos deja un número de resto que es el 5 y, por tanto, el regente del año sería JÚPITER. Véase el ejemplo al lado.

Entonces, ¡vamos a hablar un poco de Júpiter, regente de 2007!
Júpiter es el mayor de los planetas que giran alrededor del Sol. Era llamado por los antiguos el Padre de los Dioses, el Gran Benéfico y se le llama también el Dios del Rayo. Su diámetro equivale a 12 veces el de la Tierra y su volumen es de 1.370 veces el volumen de nuestro planeta. Su masa es tres veces mayor que la de todos los planetas reunidos y su peso es 310 veces mayor que el de la Tierra. Su diámetro es de 142.000 Km. La distancia media para con el Sol es de 779 millones de Km. Y le lleva aproximadamente 12 años dar una vuelta completa alrededor del Sol a una velocidad de 46.660 Km/h. Júpiter posee una inclinación de 1º18’31 en relación a la elíptica y gira sobre su propio eje en apenas 9 h 55 min.
Júpiter posee 16 satélites (o lunas) ya identificados, de los cuales, cuatro son bastante más grandes que los otros. Júpiter tiene también anillos como Saturno, pero bastante menos visibles. Está formado primariamente de hidrógeno, helio y metano, que circundan un núcleo bastante macizo y denso. Es debido al hecho de ser Júpiter el mayor planeta de nuestro sistema solar, que él con su fuerza gravitacional atrae hacia sí la basura errante de nuestro sistema. Por esa razón él acaba ‘desviando’ muchos asteroides que podrían alcanzar a la Tierra de forma desastrosa.

En mi experiencia de astróloga, he notado que los ciclos de doce años ofrecen muchas oportunidades a las personas, expanden las promesas tanto para el lado positivo cuanto para el lado negativo. Los jóvenes, niños y niñas, al llegar a los 12 años, abren sus horizontes al mundo exterior, saliendo del “cascarón” en que la familia los confina. Comienzan a ir a los acontecimientos sociales, conocen a nuevas personas, salen para descubrir el mundo allá afuera, buscando avanzar para romper los límites establecidos por el núcleo familiar. Esta edad presenta una gran oportunidad de crecimiento y no raramente estos jóvenes comienzan a lanzarse a aventuras arriesgadas, a actividades deportivas que los llevan – a veces – a viajar para lejos de casa. Un entusiasmo muy evidente invade a estos jóvenes que los lleva a desafiar los límites (impuestos por Saturno) para destacarse en sus habilidades específicas: danza, lucha, música, bandas de rock, todo les vale para encontrar su identidad propia. Aunque sea en grupo, dentro de su propia pandilla.

Júpiter tiene esa propiedad de expansión, que lleva a la persona a romper los límites para sobrepasar las fronteras limitadas hasta entonces. A los 24 años el hombre y la mujer se sienten maduros, y, al salir de la facultad, se lanzan a la conquista del mundo profesional, con un entusiasmo y un optimismo impar. ¡Que maravillosa edad es esa, que presenta tantos desafíos y tantas posibilidades de superación! En este momento también se amplían las relaciones sociales y se inicia un nuevo período de conquista del mundo material con los resultados consiguientes. Esas influencias son combinadas, no obstante, con los ciclos de Saturno, de crecimiento y responsabilidad. El tránsito del planeta Júpiter por las casas del Mapa Natal indica los ciclos personales de expansión de cada cual en una determinada área, pero no olvidemos que, dependiendo de los aspectos recibidos por este planeta, la expansión puede ser positiva o negativa. La negativa es seguramente ligada al exceso, en todos los sentidos: el exceso de riesgo lleva a la persona a desconsiderar los peligros, en todos los campos de acción. Sea financieramente, abriendo negocios y contrayendo deudas sin considerar las consecuencias, o en los deportes, asumiendo riesgos que llevan a accidentes y desgracias, o incluso, lanzándose en aventuras asombrosas mundo afuera. En todos los casos el exceso de entusiasmo y optimismo puede conducir a la ruina. El filtro jupiteriano es entonces benéfico y maléfico al mismo tiempo, y esa acción dependerá también de los planetas que Júpiter encontrará en su camino. Los ciclos Júpiter/Sol son particularmente importantes en la vida de la persona, inclusive desde el punto de vista de la salud. Durante la conjunción de Júpiter con el Sol, por ejemplo, la persona estará en el auge del optimismo y de la energía y se sentirá invencible, lanzándose en acciones temerarias. Inversamente, en la oposición o cuadratura Júpiter/Sol, el individuo podrá estar con poca energía y motivación, y tenderá a cruzar los brazos y a quejarse de la falta de suerte.Los ciclos de “baja” de Júpiter también son alternos, correspondiendo a las cuadraturas y oposiciones del planeta consigo mismo (planeta en tránsito sobre planeta del mapa natal): a los 18 (12+6) años aproximadamente (la euforia de la mayoría de edad), a los 29 (este es un ciclo importante, porque se superpone al ciclo de Saturno), a los 42 años, a los 54, etc.

Así, para saber si te encuentras en un período de alta o de baja acción de Júpiter, analiza cómo han sido esos ciclos de 12 años en tu vida: sabe cómo aprovechar de ahora en adelante los ciclos de pico positivo e intenta prepararte para los picos de acción negativa para no acabar encontrándote en camisas de once varas, sin saber dónde dar con la cabeza. Júpiter se tiene por benéfico, pero no te olvides: ¡no todo lo que reluce es oro!

En otro análisis, y siempre en el sentido de “expansión” podemos también comprender que es posible expandir nuestro conocimiento, nuestro saber, nuestra cultura, bajo la acción benéfica de ese planeta. Podemos ir más allá de las fronteras limitadas de nuestro pequeño “yo” para asimilar y comprender también qué es lo que el “otro” puede ofrecernos. Podemos expandir el conocimiento espiritual, teniendo acceso a nuevas religiones y filosofías de la vida que abran nuestros horizontes personales, llevándonos a un mayor conocimiento de la verdadera noción de DIOS, del TODO del que formamos parte. ¡A fin de cuentas... SOMOS TODOS UNO!

Por último, daremos algunas características de ese regente de 2007:
Júpiter, también llamado Dios del Rayo – corresponde a la Sephirot de nº 4 del Árbol de la Vida.
Genio Planetario: Arcángel Tzadkiel
Fuerzas angelicales: Chasmalim o Seres Brillantes o Dominaciones.
Color en Briah es el Azul.
Piedra favorable: Zafiro o berilo
Favorece principalmente a los signos de Sagitario y Piscis que tendrán una gran expansión en este próximo año.
La letra del Alfabeto hebraico correspondiente a esa energía es Ghimmel, una letra arquetípica cuyo valor numerológico es el 3. Indica el movimiento orgánico de la Rueda de la vida. Juntamente con la letra Lamed y Shin – 3:30:300, expresa el movimiento en progresiva expansión, desde la acción funcional descontrolada de Ghimmel a través del agente controlador Lamed hasta expandirse en el universo bajo la forma de Shin, que es míticamente considerado como la esencia del Espíritu Santo, el aliento de DIOS.

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São Paulo, Diciembre de 2007


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Graziella Marraccini é astróloga, taróloga, cabalista e estudiosa de ciências ocultas e dirige a Sirius Astrology. Conheça meus serviços on-line
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