Retorno al Gran Sol Central – La Era de la Abundancia
por Vera HT em STUM WORLDAtualizado em 10/11/2004 20:55:48
Traducción de Melissa Park - [email protected]
Hoy les voy a contar una experiencia que tuve con El Comandante Ashtar, hace algunos años atrás. Yo estaba haciendo una meditación, cuando empecé a sentir una profunda emoción. En un determinado momento, sentí que mi 3º ojo (visión interna que se localiza en la cabeza entre los ojos) se abría y vi Al Comandante. Lo que más me llamó la atención en ÉL, fue el hecho de que en el centro de su cabeza sobresalía una espiral. Él se fue aproximando a mí y tocó con su cabeza la mía. Inmediatamente, me transporté a una velocidad increíble, a través de un túnel lleno de símbolos, hasta que llegué a un gran triángulo de luz, en cuyo centro brillaba un sol muy fuerte, dentro del cual había un ojo. Este triángulo, para mi, parecía la propia Fuente Universal. En este momento, Ashtar comenzó a hablar conmigo telepáticamente:
“Todo discípulo es iniciado por su Maestro directo. Activé su 3º ojo, o el 10º Portal, en el cual usted entró, llevándola de retorno al Gran Sol Central, con el Cristo habitando su interior. Es preciso que se transforme el cuerpo físico carnal, a través de la energía del Espíritu Santo, en un cuerpo de Luz. Existen, para este proceso, grados evolutivos o niveles. En el 1º nivel, se manifiesta la estrella de Belén (6 puntas), que en el próximo nivel se transformará en la estrella de 8 puntas, igual a la Estrella Solar 11, que es la estrella del Iniciado. Hoy, ustedes son esta estrella: semillas estelares al servicio de Cristo, por opción! La estrella de Belén es El Propio Mesías que habita en cada célula de sus cuerpos. Cuando consigan liberarse de todo peso que cargan inútilmente, vida tras vida, activarán la Luz del gran Sol Central, dentro de cada célula de sus cuerpos, alcanzando, así, su estado de derecho: o de la Abundancia Divina.
Su Humanidad se preocupa demasiado con los bienes materiales y no piensa en la economía del futuro, que será a base de intercambios.
Ustedes creen que merecen amor, salud y prosperidad?
Ustedes no juzgan a los que tienen más que ustedes, condenándolos?
Ustedes utilizan mal el poder y la riqueza, interna y externa. Aprender a usarlos con sabiduría y amor, es parte esencial en el aprendizaje de la vida tridimensional.
Ustedes deben anhelar la abundancia. Basta pedir para que todas las dádivas les sean dadas, siempre que sea para el bien de todos los involucrados. No siempre el exceso de bienes lleva a la felicidad, al contrario, pues es un gran estorbo a la evolución, si es mal utilizado. Ustedes deben recibir con gratitud los bienes que les son enviados, teniendo conciencia de que ellos vienen para su bienestar y para ser compartido con quien lo necesita, porque todo es energía, inclusive el dinero, y, como tal, no debe ser egoístamente guardado, lo que llevaría a un estado de estancamiento. Así es como el agua que siendo energía pura, cuando es bien utilizada genera energía, cura, alimenta... es vida! Cuando se estanca, se pudre generando males.
Ustedes deben practicar el desapego, tanto a nivel emocional como material, debiendo estar listos para abandonar todo y proseguir, en caso sea necesario. Apenas en cuando fuesen libres del ego y viviesen para la luz de sus propios Cristos internos, sus Herencias Divinas de abundancia en todos los sectores de sus vidas, les serán restituidas.
En el futuro las riquezas del planeta serán redistribuidas de tal modo que circulen en pro de la humanidad.
Algunos servidores de la Luz, tendrán la misión de redistribuir las riquezas materiales y de gobernar naciones. Ya otros tendrán la misión de promover el despertar de las almas así como el anclaje de nuevas energías que llegan al planeta en cuerpos infantiles. Una misión se suma a la otra en igual importancia rumbo a la perfección.
La elevación de la vibración individual terminará por elevar el padrón vibratorio de las masas que por fin reconocerá la Luz Primordial como único camino, lo que, consecuentemente, atraerá la Herencia Divina.
No habrá más fronteras de ninguna especie, solamente fraternidad, paz y abundancia.
Las semillas de la nueva Era ya están siendo plantadas hace algún tiempo por los servidores de la Luz y germinarán en el suelo fértil de las conciencias que se abrieran a la Energía Crística.
Cada uno debe comprometerse, ahora, en buscar la totalidad, objetivando reunir sus partes o energías mal calificadas que fueron esparcidas por el éter del planeta a lo largo de los siglos y, a través del amor irradiado por el Sol Central a partir de sus centros cardíacos, concientemente transmutarlas en Luz, devolviéndolas puras a la Fuente Donadora de toda la vida universal.
Paz en todas las Fronteras
Paz en todos los Cuadrantes”
