¿Ya tienes tu lista de buenas intenciones para 2012?
por Graziella Marraccini em STUM WORLDAtualizado em 18/01/2012 15:36:35
Traducción de Teresa - [email protected]
Estoy segura de que sí. ¡Y estoy casi segura también de que acabarás dejando muchas de tus buenas intenciones por el camino! De hecho, es una costumbre muy corriente esa de hacer una listita de promesas y determinaciones para cumplir en el año nuevo que se inicia, pero me parece que esa puede ser una muy mala costumbre puesto que, en muchos casos, algo quedará sin cumplir y acabará creando, primero ansiedad y posteriormente frustración. ¿Tienes el hábito de fumar y quieres dejarlo? ¡No hace falta esperar al año nuevo para dejar ese vicio tan destructivo! Pero quizá necesites una configuración astrológica favorable, ya que en otro caso no serás capaz de cumplir tu promesa. Pese a lo que se ha difundido en un anuncio televisivo, esperar las ‘configuraciones astrológicas favorables’ puede ser muy útil, como lo es el aguardar el momento propicio para la siembra de una determinada especie vegetal. ¡Todo tiene su momento oportuno! Por ejemplo, normalmente un vicio como el tabaco, el alcohol (u otros similares), resulta de una configuración astrológica (del mapa natal) que favorece esa dependencia en la persona. Esa inclinación al vicio puede ser detectada en el mapa natal, del mismo modo que el ADN indica su predisposición a esta o aquella enfermedad. En el caso del vicio, el planeta Neptuno está ciertamente implicado y juntamente con él la Luna (o más raramente el Sol) y muy probablemente el planeta Marte. En muchos casos, la presencia de ese planeta en un determinado signo también suscita el mismo efecto. Y sobre Neptuno y sus efectos, negativos o positivos, ya he escrito varios artículos publicados en este Website. Por esa razón invito a mis lectores a buscarlos y leerlos con atención, para una mejor comprensión de mi razonamiento.
De hecho, lo que deseo exponer en este artículo es una certeza: debemos tener en mente que solo nuestra Previsión Astrológica anual podrá indicarnos con claridad si lograremos o no alcanzar la meta propuesta, cumpliendo así nuestra intención. Comprar una casa, hacer un viaje internacional, casarnos o divorciarnos, tener un hijo, etc. etc., todos esos acontecimientos estarán indicados en nuestra Previsión anual que comprende las direcciones primarias y secundarias y los tránsitos lunares. Ese análisis nos indicará cuándo debemos movernos, o sea, cuál será el mejor momento para actuar y hacer que la cosa ocurra. ¡Averiguar si los astros son favorables o contrarios no es acatar una superstición popular, sino que es, principalmente, una forma inteligente de aprovechar el momento oportuno a fin de tener todas las probabilidades a nuestro favor!
Pese a todo, al igual que esas previsiones sirven para ayudarnos a programar nuestras tomas de decisión, ciertamente sirven también para ayudarnos a evitar los eventuales peligros que encontraremos en nuestro camino, a lo largo de los próximos doce meses o del período analizado. O sea, del análisis puede resultar algo que ni siquiera teníamos ‘programado’, pero que ciertamente sucederá. Aprovechar una ocasión de ganar en la lotería puede ser una buena cosa ¿no es cierto? O programar un viaje al exterior sabiendo cuál será la mejor época para viajar, y si el viaje transcurrirá de forma tranquila. Y conocer el mejor momento para entablar una negociación importante, o una acción en la justicia. Me gustaría aclarar que, a diferencia de una lectura de tarot (que es un oráculo), la cual refleja el momento astral que liga el cuerpo sutil del consultante y del consultor y requiere una sintonía especial para dar buenos resultados, ¡la previsión astrológica no necesita siquiera la presencia de la persona en el consultorio del astrólogo para estar acertada! Una Previsión Anual puede ser útil para programar una operación quirúrgica, un viaje, un embarazo, la compra de una casa, etc. Todo puede ser ‘visto’ en el mapa de la persona, pues todo está escrito en el cielo, ¡si bien no todo lo que está escrito tiene necesariamente que suceder! Muchas embarazadas acuden a mí para programar el nacimiento de su bebé. Por lo regular, yo pesquiso un día probable e indico la mejor hora posible dentro del plazo establecido por el obstetra, recordando los ciclos lunares. Con todo, quiero aclarar que el astrólogo no asume el papel de Dios: no modifica el destino de aquel bebé. ¡Muy probablemente el bebé acabará naciendo en el momento adecuado para que él (su espíritu) cumpla el destino! El astrólogo no modifica lo que está escrito en las estrellas; solamente lo interpreta, y esclarece al profano en lenguaje asequible cuáles serán sus posibilidades. El astrólogo estará simplemente haciendo ‘lo que Dios le permite hacer’, ¡y con mucha humildad! ¡Como astróloga, suelo posicionarme como intérprete, como canal, nunca como agente del destino de la persona!
Por esa razón, en muchos casos y pese a todas las interpretaciones y a las precauciones tomadas, los acontecimientos no suceden tal como esperamos o deseamos. Por ejemplo, si tienes que extirpar un tumor y ese acontecimiento aparece en tu destino, tú lo harás pese a haber sido advertido en la previsión de que (en este caso) tendrías a Plutón en mal aspecto en un determinado período. No es posible evitar la manifestación de esa energía. Podemos únicamente canalizarla hacia el aprendizaje. La energía plutoniana es por lo regular destructiva e indica que podrías tener que enfrentarte a la muerte, o a una pérdida o al final de algo y, por lo tanto, tendrías que ‘extraer algo’ de dentro de ti. Entonces, te preguntarás: pero si no podemos evitarlo ¿para qué saberlo? ¡Porque el ‘saber’ nos hace libres! Es el conocimiento y la aceptación de nuestro destino lo que nos hace progresar espiritualmente.
El aprendizaje del alma es todo lo que el Cosmos desea que hagamos en cada encarnación. Si tenemos esto en mente y no impedimos o evitamos ese aprendizaje, la probación (el obstáculo, la enfermedad, la pérdida) será menos dolorosa y sus efectos físicos muy probablemente no se producirán, o estarán reducidos al mínimo. ¡A lo largo de la vida he aprendido que cuánto más conscientemente aceptemos este aprendizaje, tanto más ligero será el fardo que tengamos que arrastrar! El Cosmos tiene mil maneras de enseñarnos “las cosas que estamos obligados a aprender”, pero Él (el UNO) no quiere castigarnos, sino simplemente conducirnos al camino de la evolución espiritual. El aprendizaje voluntario evitará un mal mayor y en muchos casos servirá para que hagamos un ‘up-grade’, ganando puntos en nuestra evolución.Entonces, apreciados lectores, esa tal ‘listita de buenas intenciones’ según mi parecer es absolutamente inútil, a menos que coincida exactamente con aquellas actitudes que el Cosmos desea que asumas durante este próximo año. ¡Estando en sintonía con el Cosmos no sufrirás decepciones ni frustraciones, aplazarás los sueños imposibles y tratarás de alcanzar solamente los objetivos posibles! La astrología, ese arte milenario, nos enseña aún otra cosa: ¡el secreto de la felicidad consiste en hacer bien aquello que estamos obligados a hacer! Y tú, estimado lector, ¿ya te has enterado de cuáles serán tus objetivos para 2012? ¿Cómo te enfrentarás a tu destino?
Quiero invitar a mis lectores a que aprovechen la promoción especial que el STUM está ofreciendo hasta el final de este mes de enero y pidan su Previsión Anual. Solo hasta el final de enero podrán elegir el lote “Mapa Natal + Previsión Anual” o bien “Previsión Anual + Revolución Solar”. ¡Aprovechad!
A quien pueda interesar, estaré atendiendo en Niterói-RJ, en febrero. Por tanto, quienes viven en esa región pueden enviarme un correo electrónico y marcar su consulta por anticipado.
¡Deseo a todos un año muy feliz, entretejido de realizaciones y de felicidad interior!
São Paulo, 10 de enero de 2012.
