No siempre la presencia de una abuela puede representar un encuentro de paz y alegría.
José Vítor tiene 6 años y es sensitivo. Su madre y su padre no lidian con espiritualidad y esto afecta y desprotege al pequeño.
Yo, como terapeuta, hago lo que puedo a distancia. La abuela desarrolla una relación con ellos solamente como suegra, sin demasiada amistad. Siempre que había contacto, José Vítor sufría con pérdidas de energía y dolores en el estómago. Le enseñé: en estas ocasiones, imagina que tienes en tu ombligo una medalla dorada o verde en forma de triángulo. Esa medalla forma parte del proceso del Arcángel Miguel.
¡Y hay más! dije al niño. Si no te da tiempo de hacer todo eso, envíame un ZAP rápidamente. Y entonces, de cuando en cuando, yo recibo la llamada: "¡Socorro, Wilson, mi abuela está llegando!"
Puede parecer extraño, porque yo mismo utilizo mucho la presencia/voz de los abuelos para curar disfunciones emocionales de adultos y niños. ¡Hay casos y casos!
¡Caramba, Wilson!, yo sin saberlo ya me estaba preservando contra las malas energías, porque mis guías me mandaron colocar un ajo en el ombligo para protegerme. Me pareció extraño, pero no pregunté nada. Cuando yo bajaba a casa de mi madre, subía después a mi casa cargada con una opresión en el estómago y mis hombros pesados. Entonces, cuando empecé a tapar mi ombligo con ajo, cubriéndolo con una tira adhesiva, yo mejoraba".
Fue lo que reveló Aline, una cliente. Antes de que yo publicase el artículo, ella pidió socorro, porque su hermana estaba haciendo un "trabajo" contra ella. Le envié el texto con la sugerencia de protección en el ombligo y ella mandó esa respuesta.
Otra mujer empezó una terapia conmigo porque se sentía muy deprimida en el mes de febrero. ¿Sería el tal infierno astral? Ella cumple años en marzo. ¡Yo no acepto esa teoría! Entiendo que en ese período, antes y después, hay una revolución, un balance que el alma lleva a cabo para evaluar y programar un nuevo tiempo. ¡Eso sí! Pues bien, descubrimos que cuando ella tenía cinco años, en el mes de febrero, la abuela que más quería murió. Y ella se puso muy triste.
Hice el proceso de "reencuentro" entre ella y la abuela, trayendo la presencia de ésta por proyección astral "permitida". Ella sintió la energía de la abuela y quedó en paz. A continuación, le sugerí que imaginase la escena del velatorio. Congelamos la escena y "quemamos" la imagen. Entonces, la memoria nociva, guardada en su inconsciente se deshizo y la depresión fue reduciéndose hasta ser eliminada.
"Estoy muy necesitada de tu ayuda", dice Priscila. "Mi hermana mayor nunca se ha llevado bien con mi padre, ella lo ofende con malas palabras, ya le pedimos que cambiase, ¡pero ese odio que ella siente cada vez aumenta más!
Mi madre cuenta que quien tenía esa malquerencia hacia mi padre era mi abuela, su suegra.
Cuando entro en el cuarto de mi hermana, siento vibraciones extrañas. ¿Crees que mi abuela puede estar influenciando a mi hermana? Ella murió hace once años.
Uno de estos días, mi hermana se despertó posesa, insultando a todo el mundo. De inicio, ella habla entre dientes, muy bajito. Es extraña su manera de proceder. Empieza a decir cosas semejantes a lo que decía mi abuela cuando era viva. Parece estar incorporada.
Ella desde muy niña siempre tuvo pesadillas y en todas ella agrede a mi padre, y se pone a aullar, como si estuviese poseída.
Queda bien claro, en ese episodio, que hay una posesión sobre la muchacha. Cabe aquí, no obstante, una investigación para descubrir si es la abuela que vuelve del mundo paralelo para actuar a través de la sensibilidad de la nieta y atacar al yerno, o nos deparamos con un Ser vengador y vampiro que se aprovecha de una relación de odio entre ambos para la posesión sobre la nieta sensitiva.
Sea como fuere, realicé con ella un proceso de alejamiento, consciencia y perdón. La abuela fue encaminada, el padre fue incentivado al perdón y sugerí a la chica estudio y aplicación de su talento mediúmnico para evitar invasiones mentales delictuosas.
Las pesadillas y discordias terminaron, quedando tan sólo la sensación suave y amorosa que una abuela irradia y que debe existir entre padre e hija.
Joyce narra lo sucedido en estos días. Trajo para el "Grupo Sintonía de la Luz" el nombre de su abuela. Ésta padecía unas escaras profundas y dolorosas.
"En la reunión, la asistencia que se estaba haciendo era para doña Gení, que tiene una herida en la pierna. Marcela coordinaba el proceso y me pidió que quitase la energía acumulada en la paciente, en el cuello y la lumbar. Para mi sorpresa, yo vi en ella las heridas que estaban en la espalda de mi abuela. ¡Increíble! En esto, percibí a una persona por la ventana en el lado de fuera, miré y era mi padre, ya desencarnado. Nunca lo había visto tan nítidamente.
Luego me vino una imagen a la cabeza: él, tomando la mano de mi abuela y ella levantándose de la cama y marchándose con él.
Empecé a llorar y no era capaz de parar, por el dolor de saber que ella estaba próxima a marcharse a la Patria Espiritual.
Seguidamente, el Pimenta-Espíritu, incorporado en Marcos, y Marcela, hicieron un procedimiento energético para hacer desaparecer las heridas de ella y yo me calmé.
Salí tranquila de la reunión y más tarde supe que mi abuela acababa de desencarnar.
Agradezco a Pimenta y a Marcela por el trabajo realizado ayer.
El corazón de ella se paró y ella fue tranquilamente para el mundo espiritual, sin heridas y sin miedos. ¡En paz!
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