Lo que necesitas saber sobre la trama psicológica de las madres narcisistas perversas
Antes de iniciar este artículo, debo dejar claro a las hijas de madres narcisistas perversas, que por mucho que hayan sufrido y que aún puedan estar sufriendo, la posibilidad de recuperación de los traumas vividos es grande, que éstos pueden ser dotados de nuevo significado, con la real posibilidad de pasar página.
La parte más dolorosa es cuando se adquiere conciencia sobre los malos tratos que muchas veces ni velados son. Saber que se tiene una madre narcisista, al principio no es ni sencillo ni fácil de concebir. Entender que toda la necesidad de acogida y de confianza que se busca en la madre está comprometida es avasallador. El camino de reparación y de cura emocional, sin embargo, está en el avance de la percepción, cuando se adelanta en la comprensión total de la trama derramada.
Las víctimas de este tipo de convivencia diariamente reciben críticas, descalificaciones de todas las maneras, intolerancia y agresividad, independientemente del esfuerzo que hayan hecho para acertar. Uno de los hijos siempre será tenido como el hijo de oro, aquel que siempre es el protegido, el visto como el mejor de todos y a quien descaradamente todo le es disculpado, mejor dicho, nada de lo que hace se considera equivocado. La hija víctima de este tipo de madre enfermiza, siempre será la que no se encaja en nada, la que lo hace todo mal, en fin, será el chivo expiatorio de todo lo que pueda salir mal y no sirve. Por la competición de esa madre narcisista, vuelta hacia sí misma, generalmente una hija del sexo femenino es la elegida para cumplir ese papel.
Las madres narcisistas perversas enjaulan a sus crías dentro de un guión bastante preciso cada vez que sus hijas empiezan a desarrollar en algo, o revelan mayor autonomía sobre sí mismas. El resultado será una descalificación masiva de todo cuanto elijan o se atrevan a construir. Y como esto suele suceder desde que son pequeñas, imaginad cuánto se vuelven inseguras y con su autoestima totalmente fragmentada. Cuando salen al mundo pueden acabar teniendo comportamientos duales, y ora tienden a cumplir todos los deseos del otro, ora sienten la necesidad de protegerse de ese otro, por el temor a la pérdida total de identidad, debido a los traumas sufridos. Algunas víctimas llegan a mi consultorio extremadamente ansiosas, pudiendo recibir diagnósticos equivocados. Cuando la trama es revelada por algún miembro de la familia, las más de las veces no hay acuerdo sobre la veracidad de este tema, siendo que la víctima que está más despierta, muchas veces necesita auxilio terapéutico para desintoxicarse y no caer en el cuento de que ella es ingrata o que estaría volviéndose loca. Tanto el teatro de la victimización, como el de la acusación de esas madres, son extremadamente agresivos y potentes.
Por increíble que pueda parecer, las víctimas cuando despiertan comprenden cuán fuertes fueron siempre, y a partir de esta percepción, ejercen con autonomía su derecho de tomar buenas decisiones, siguiendo por la vida con otros mapas existenciales bastante distintos de aquellos por los que han pasado. Tienen todas las posibilidades de que se produzca una recuperación total.
Silvia Malamud é colaboradora do Site desde 2000. Psicóloga Clínica, Terapias Breves, Terapeuta Certificada em EMDR pelo EMDR Institute/EUA e Terapeuta em Brainspotting - David Grand PhD/EUA.
Terapia de Abordagem direta a memórias do inconsciente.
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Autora dos Livros: Sequestradores de almas - Guia de Sobrevivência e Projeto Secreto Universos
Publicado por Silvia Malamud
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