La Magia es una Ciencia Sagrada que se basa en la manipulación de energías naturales invisibles - por tanto extra-físicas - con los más variados objetivos. Un estudiante de magia, al menos en teoría, debería aplicar todo su esfuerzo a buscar el conocimiento de la interacción entre las energías de la naturaleza, los hombres y todos los seres vivos, ya que la manipulación consciente de las energías naturales se produce mediante la correcta aplicación de las facultades psíquicas y espirituales del así llamado mago.
En el concepto coloquial o popular, macumba sería también magia, más ligada a lo que se suele llamar ebó, hechizo, despacho, cosa-hecha, mironga, mandinga. Esa no es una definición correcta, pues el significado de esa palabra difiere y mucho del concepto popular aplicado.
La primera definición de macumba que se encuentra en cualquier diccionario es: antiguo instrumento musical de percusión, especie de güiro, de origen africano, que emite un sonido rasposo (que rasca); y Macumbero es el tocador de ese instrumento.
Popularmente, la palabra macumba también se emplea para designar genéricamente los cultos en las religiones de origen afro-brasileño como la Umbanda, por ejemplo. En ese contexto, tales instrumentos son utilizados en los rituales específicos de la religión.
Se hace necesaria esa breve explanación para que el lector comprenda que el sentido original de Magia y Macumba en una utilización más popular, son los mismos, o sea, manipular fuerzas ocultas o extra-físicas de la naturaleza.
La etimología de la palabra Magia proviene de la lengua persa, magus o magi, que significa sabio. De la palabra "magi" también han surgido otras, tales como "magister", "magistra", "magisterio", "magistral", "magno", etc.
Procurando resumir los objetivos y beneficios que se han buscado siempre a través de la magia, podemos sintetizarlos básicamente en dos:
1- Establecer contacto con los aspectos ocultos e invisibles del universo que, en ese caso más específicamente, podemos entender como una tentativa interminable de comprender el Gran Misterio de la Vida, en especial sobre sus aspectos divinos.
2- Obtener provechos en el sentido amplio de la palabra, como la consecución de objetivos personales, colectivos, curaciones, prosperidad, armonía, conocimiento, sabiduría, apertura de caminos. En otras palabras, podemos considerarla una búsqueda de conquistar más poder en diversos segmentos y aspectos de la vida en todo su contexto.
¡Todo ser pensante es un mago! Aparte de eso, un mago no es alguien que haga daño o que necesariamente esté sintonizado con valores morales depravados. Mago es cualquier ser que aplica su voluntad personal (intención) sumada a su pensamiento enfocado hacia algún objetivo o propósito.
En esta aclaración es bueno que comprendamos que un cura es un mago, y un pastor, un monje, un espírita, un reikiano, un psicólogo, un escéptico, un político, un ejecutivo, un ama de casa, yo, tú. Todas las personas que se dediquen a concentrar un pensamiento y una voluntad hacia algún objetivo, están haciendo magia. Lo que define el tipo de magia es la mayor o menor aptitud del mago, así como su patrón moral. Si los objetivos son egoístas, sintonizados con valores depravados o destituidos de moral, entonces tendremos la producción de magia negra. Por otra parte, si los objetivos son altruistas, vueltos hacia el bien mayor y sintonizados en patrones morales más elevados, entonces tendremos la representación exacta de la magia divina, magia de luz o magia blanca.
¿Cómo controlamos ese proceso? Controlando y mejorando lo que somos y lo que pensamos, ¡en otras palabras "orando y vigilando"!
La magia es la manipulación de las fuerzas mentales aliadas a la voluntad de cada ser, o sea, es la resultante de la energía de la intención sumada a la del pensamiento. De esa forma ¡todos somos magos!
El término mago puede incluso no agradar a muchas personas; con todo, hemos de dejar claro que sirve para denominar a todo ser humano que enfoca un pensamiento y un deseo en el sentido de realizar sus objetivos.
En el pasado, en las antiguas escuelas de misterios, de civilizaciones que se destacaron en la historia de la humanidad, un selecto grupo de personas fue sometido a rigurosos entrenamientos en el uso de la magia en sus más diferentes variaciones y linajes. Cuando las enseñanzas de esas antiguas escuelas fueron utilizadas para el Bien Mayor, el hombre produjo increíbles beneficios para la humanidad. Cuando esas mismas enseñanzas cayeron en manos de personas egoístas y todavía no preparadas para comprender las enseñanzas de Cristo, entonces grandes atrasos conscienciales se instalaron, aparte de muchos conflictos de grandes proporciones.
Actualmente gran parte de la población mantiene la creencia de que quienes hacen magia son del mal y cuando escuchan esa expresión, inmediatamente entienden que ese término solo es utilizado por seres ligados al universo maligno.
Tú, cuando rezas, ¡haces magia! Cuando una pareja planifica engendrar y criar un hijo, ¡hace magia! Cuando sueñas con un coche nuevo y más tarde llegas a tenerlo, ¡haces magia! Cuando te quejas de la vida, te lamentas y criticas todo lo que está a tu lado, ¡haces magia! Cuando miras el noticiero policial y sufres con los sucesos y crímenes, ¡haces magia! Cuando hablas mal de otra persona, cuando eres chismoso, ¡haces magia!
Cuando haces sexo casual, solamente con el propósito de saciar los deseos más primitivos, ¡haces magia! Cuando haces el amor con la persona amada, en una relación estable y sincera, ¡haces magia! Cuando deseas el mal a otros ¡haces magia! Cuando deseas el bien a otros ¡haces magia! Cuando mantienes tu pensamiento negativo ¡haces magia!
¡Todo es magia, no obstante, si es blanca o negra lo define la pureza, el amor de la intención y la base moral del mago! Esa es la ley, ese es el ingrediente secreto de la magia.
Lo que determina la fuerza mayor o menor de una magia es la atención enfocada al objetivo. Cuanta más atención se ponga en el asunto, cuanta más concentración mental y dedicación, mayores, más intensos y más precisos serán los resultados. Actualmente remanecen muchos estudios cuyo objetivo es la búsqueda de conocimiento acerca del término, sin embargo aún quedan aquellos individuos que insisten en practicar la magia con objetivos egoístas, insensatos o incluso malignos. Para esos, vaya la advertencia de que en el universo nada pasa desapercibido y cada cual cosecha lo que siembra.Aunque nunca se puede generalizar - pues ese es el gran error de la humanidad - ya que increíbles hechos y curaciones han sido alcanzados por el poder de la magia. Entonces, tengamos conciencia de que somos todos magos y debemos enfocar nuestros actos hacia el Bien Mayor, ¡haciendo al prójimo solamente lo que queremos que se nos haga! ¡Tener salud, alegría y plenitud es resultado de magia blanca hecha por nosotros mismos, sumada a la que aceptamos de parte de terceros!
¡Tener enfermedades, depresiones, amarguras, miedos, inseguridades y neurosis es resultado de magia negra hecha por nosotros mismos, sumada a la que aceptamos de parte de terceros!
Dedicación, atención y esmero son los aditivos necesarios para la magia, pero el ingrediente especial es el Patrón moral del individuo, pues solamente esto es lo que determina si la magia será blanca o negra. Muchos están haciendo magia negra sin darse cuenta ¡porque están alienados!
¡ Dios nos ilumine y nos dé discernimiento para que no seamos una de esas personas!
Es válido reflexionar.
por WebMaster
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Publicado dia 6/29/2011 9:45:08 AM em STUM WORLD
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