Es obvio que debemos comer tanto alimento natural como sea posible. En cuanto nuestras plantas están sembradas, son corrompidas por fertilizantes y pesticidas, mientras que la mayoría de los géneros alimenticios contienen ciertos conservantes y aditivos.
Las explotaciones agrícolas utilizan métodos industriales para producir cada vez más carne, huevos o leche lo más rápidamente posible. Esto implica criar gran número de animales en espacios cerrados, lo cual a menudo exige asistencia médica especial para mantenerlos sanos en condiciones precarias. Algunas granjas utilizan hormonas de crecimiento, iluminación artificial y maquinaria sofisticada.
Los fabricantes de alimentos intentan descubrir nuevas técnicas a fin de prolongar la vida útil, mejorar el sabor y reducir los costes de sus productos. Esto con frecuencia se logra en la agricultura comercial, que compromete los ecosistemas globales.
Al alterar de modo artificial nuestro alimento, se está también poniendo en riesgo nuestra salud y causando más dolencias, y la amenaza de una pandemia de obesidad en muchos países desarrollados. Hemos llegado al punto en que lo natural es mucho más caro y más difícil de obtener que lo que no lo es.
Por Mike Sygula. De la traducción de Ivete Brito - [email protected] – link
En los próximos días publicaré los restantes motivos para el título.
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Publicado dia 2/25/2015 11:32:50 AM em STUM WORLD
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