La Tele-Radiestesia – Radiestesia hecha a distancia – es una práctica común para todos los radiestesistas y poco conocida por la gente.
La creación de testigos energéticos permite que las energías sean plasmadas y captadas, propiciando diagnósticos precisos.
Infinitas han sido las investigaciones realizadas hasta llegar a la conclusión de la posibilidad de tal fenómeno. Las experiencias iniciales fueron llevadas a cabo por la Sociedad Americana de Radiestesia. Se trajeron cartas tipográficas y así se identificaron puntos de energías telúricas, comprobadas posteriormente in situ.
Una captación energética de un testigo, ya sea una foto o la planta de una casa, y la afinación mental del radiestesista aseguran que la sintonía sea posible, permitiendo así la obtención de energías específicas.
Por la fotografía de una persona, es posible a través de la mesa radiónica cuántica hacer una evaluación completa de sus frecuencias vibracionales.
Inicialmente, observamos la frecuencia general. Tenemos siempre un parámetro de referencia y, partiendo de éste, abrimos las verificaciones complementarias, tales como la frecuencia etérica o vital, que concierne a nuestro estado de salud; después se averigua la parte emocional, notando cuán impregnados estamos de pensamientos y sentimientos negativos, que son los responsables por la caída de nuestra frecuencia general.
Seguidamente verificamos la parte espiritual, nuestra conexión con lo Divino, si existen interferencias y ductos obstruidos; verificamos también las energías emitidas por los ancestros y, por último, posibles interferencias de magia – dejando claro que el término a que me refiero como magia es hacer que alguien renuncie a sus planes y asuma los nuestros – o magia ritual.
Terminada esta verificación general, partimos para la corrección de todo lo que ha sido encontrado aplicándole la mesa radiónica cuántica. Al término, hay una elevación de frecuencia general. A continuación la configuración energética de la persona ya se modifica.
Con base en la planta de la casa o del terreno, podemos verificar las energías presentes en el lugar y curarlas.
A comienzos de 1900, con el descubrimiento del “inconsciente” por Sigmund Freud, se produjo una revolución en los conceptos existentes. Este nuevo enfoque ha arrojado una luz sobre el mecanismo de funcionamiento de nuestro cerebro. Sabemos hoy que nuestro inconsciente puede contener informaciones acerca de casi todo lo que nos rodea.
La precisión del diagnóstico hecho por la Tele-radiestesia está asociada a una buena práctica de la Radiestesia convencional y comprobatoria. Primero, hacemos una serie de ejercicios que puedan ser confirmados y, a continuación, partimos para una captación a distancia. Un buen radiestesista se hace con mucha práctica y, echando mano de este otro recurso a distancia, enfatizamos una vez más las innumerables posibilidades de actuación de la Radiestesia en tu vida.
Cuento a continuación un caso de estudio efectuado a distancia:
Una pareja del interior de São Paulo acudió a mí por un problema serio de salud en los hijos. El niño tenía una alergia en las articulaciones que nada curaba y la niña tenía una otitis crónica. Habían consultado a varios médicos, quienes propusieron tratamientos de todo tipo, sin solución, y el problema persistía.
Un amigo de ellos escuchó toda la historia y por conocer bien la Radiestesia, enseguida imaginó una posibilidad de que hubiese un problema energético en el local y me indicó a mí para la búsqueda y verificación de lo que estaba sucediendo.
La pareja me telefoneó y solicitó la consulta, por tratarse de una ciudad a 520 km de São Paulo. Sugerí que la consulta se realizase a distancia. La pareja, que ni siquiera conocía la Radiestesia, mostró cierta desconfianza, pero mantuve mi postura y les dije que me enviasen los siguientes documentos: una planta de su casa y una foto de todas las personas que viven en el local, además de su nombre y fecha de nacimiento.
Tras algunos días, recibí la documentación y di comienzo a la pesquisa; creé los testigos energéticos y empecé con la verificación de las energías de la casa. De inmediato, encontré en el patio de la casa una energía de verde eléctrico negativo proveniente de aire estancado. Pensé en tuberías cerradas, en cajas de inspección desactivadas, en todo lo posible... incluso porque para establecer un grado de confianza no podía hacer muchas preguntas. Yo quería que ellos creyesen en el trabajo de Radiestesia y se quedasen con la idea, a fin de que el tratamiento propuesto se verificase de cabo a rabo. Por experiencia, sé la importancia que tiene esto... Muchas veces damos el diagnóstico y la persona que nos contrata aplica solamente parte del tratamiento propuesto; en general por desconfianza, y lo que ocurre es que si corriges solo a medias, la mitad del problema permanece.
Proseguí en la identificación y encontré, en la localización exacta de la planta, un pozo desactivado y no cerrado por completo, lo cual hacía que el aire allí presente adquiriese una ionización extrema, transmitiendo esa energía a las personas de la casa.
Pregunté a la pareja desde cuando vivían en aquella casa. Me contestaron que desde hacía 8 meses. Indagué si los niños antes de mudarse a esa casa presentaban algún problema de salud. La madre aclaró que el hijo ya padecía este problema de alergia, pero era algo controlable, no tan intenso como se presentaba ahora.Una pista más: el problema energético generado por el pozo tenía mucho sentido. Pregunté, entonces: por casualidad, ¿quien duerme en el cuarto al fondo es su hija? ¡Bingo! Era ella, luego la niña estaba directamente bajo influencia de la energía. Pregunté entonces si el hijo dormía en el cuarto del medio. Y la confirmación estaba hecha. Interrogué, finalmente, si la pareja dormía en el cuarto delantero. Sí, estaban lejos de la energía y por el tiempo descrito de 8 meses aún no habían sido afectados.
Algo me intrigaba, yo tenía que descubrir qué tipo de alergia padecía el niño, que se había intensificado por la energía del local, pues tal como me había relatado la madre, la alergia ya existía anteriormente.
Lo investigué con todo lo posible, incluyendo en la pesquisa elementos químicos, incluso con el auxilio de mi formación en Ingeniería Química.
Descubrí que la alergia que el niño presentaba era al Cloro.
Entregué el diagnóstico a la pareja, pedí que horadasen un lugar determinado, expliqué la presencia de un pozo desactivado que ellos desconocían (posteriormente lo confirmaron) y dije que el problema de oído de la niña se resolvería en el plazo de un mes, cuando toda la energía quedase estabilizada. Expliqué que, en cambio, en el caso del niño solo quedaría minimizado, volvería a la fase en que estaba antes de la mudanza para aquella casa.
Comenté, entonces, acerca del proceso alérgico desarrollado con relación al Cloro del agua, y que sería necesaria la instalación de un filtro en la ducha que eliminase la presencia de esa sustancia química.
De inmediato llevaron a cabo lo propuesto y, pasados dos meses, ya no había problema alguno de salud en los niños. Otra prueba concreta de las posibilidades de actuación de la Radiestesia que está al alcance de todos, por medio de cursos, y también por la dedicación continua, además de la apertura de la posibilidad del empleo de la Tele-Radiestesia rompiendo fronteras.
Publicado dia 11/2/2009 11:06:47 AM em STUM WORLD
