Eligiendo la verdad
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 13/08/2011 19:32:02
Traducción de Silvana Partucci - [email protected]
Para muchas personas, llega un momento en la vida en que la verdad de quien realmente son, comienza a imponerse. Por más que intenten ignorar este llamado, él se vuelve cada día más intenso, hasta que la falsa identidad que ellas cargan se vuelve un fardo demasiado pesado y precisa ser abandonado.
Este fenómeno, conocido como el despertar interior o la noche oscura del alma, puede suceder, de repente, sin cualquier aviso, o tener inicio a partir de algún acontecimiento extremamente difícil, doloroso, como la perdida afectiva o una enfermedad grave.
Es cuando descubren que la fachada que asumieron como el yo real, se muestra, repentinamente frágil, vulnerable e incapaz de darles sustento en circunstancias desafiadoras, donde los cimientos en que se apoyaban parecen desaparecer.
Cuando llega este momento, la salida es ir cada vez más profundo en este buceo interior, por más asustador que parezca al principio. De a poco, todas las falsas camadas que encubren el verdadero ser, van siendo disueltas y se revela entonces, una fuente inagotable de paz, equilibrio y serenidad, a la cual siempre es posible retornar.
A partir de este momento, ya no nos sentimos más cómodos en la vieja identidad, pues ella se basaba en el miedo, en la angustia y en la falta de confianza en nuestro poder. Cuando este fenómeno sucede, nos entregamos a la vida en total confianza, con la seguridad de que, sea lo que sea que ella nos traiga, estará en conformidad con lo que nuestro ser verdadero precisa para crecer, expandirse y evolucionar.
Elegir la verdad es siempre el camino más saludable, aunque los contratiempos se presenten, pues, al final, las recompensas ciertamente compensarán todos los sobresaltos.
…Cuando te escondes atrás de fachadas, lo real comienza a morir y lo no real prospera, se vuelve más robusto. Si te expones, el no verdadero irá a morir, porque el no verdadero no consigue permanecer en lo abierto. Este consigue permanecer apenas en sigilo, en la oscuridad, en los túneles de la inconsciencia. Si lo traes a la conciencia, este comenzará a evaporarse. (…)
…Al comienzo va a ser realmente muy asustador, pero rápidamente comenzarás a ganar fuerza porque una vez que la verdad es expuesta, ella se vuelve más fuerte; la no verdad muere. Y con la verdad volviéndose más fuerte, te volverás más enraizado y centrado. Comienzas a volverte un individuo. La personalidad es una sofisticación social, un pulimiento social. La individualidad es cruda, salvaje, fuerte y con tremendo poder.
Solamente al comienzo habrá miedo. Por eso la necesidad de un Maestro, para que al comienzo pueda agarrar tus manos y darte soporte, para que pueda llevarte a dar algunos pasos con él. El Maestro no es un psicoanalista. Él es mucho más. El psicoanalista es un profesional y el Maestro no es un profesional. No es su profesión ayudar a las personas, es su vocación, es su amor, es su compasión.
Y por causa de esta compasión él te conduce apenas tanto cuanto precisas de él. En el momento en que siente que puedes ir por ti mismo, él comienza a soltar tus manos. A pesar que tu quieras seguir agarrado, él no puede permitir eso.
Una vez que estés listo, corajoso y desafiador; una vez que tengas experimentado la libertad de la verdad, la libertad de exponer tu realidad, podrás seguir por ti mismo. Tú conseguirás ser una luz para ti mismo.
Pero el miedo es natural…el miedo surge porque una gran crisis de identidad aparece… tú has sido un cierto tipo de persona… abandonar aquella identidad y comenzar a aprender al respecto de ti mismo desde el ABC es asustador.
…El miedo es natural. No lo condenes y no sientas que él es algo equivocado. Él es apenas parte de toda esa educación social. Nosotros tenemos que aceptarlo e ir más allá de él. Sin condenarlo, nosotros somos los que tenemos que ir más allá de él.
…Irás a descubrir el sabor de la verdad… Tu vieja identidad será perdida y tendrás una concepción totalmente nueva. No será, en verdad, una identidad, pero si una nueva visión, una nueva manera de ver las cosas, una nueva perspectiva.
…Nunca alcanzarás otra identidad. Tu vieja identidad se habrá ido y, por primera vez, comenzarás a sentirte como una ola en el océano de Dios. Eso no será una identidad porque tú no estarás allí. Tú habrás desaparecido. Dios se habrá apoderado de ti.
Si colocas en riesgo lo falso, la verdad podrá ser tuya. Y ella vale eso, porque tú pones en riesgo apenas lo falso y ganas la verdad. No arriesgas y ganas todo.
…Es mejor quedarte quieto, dice la mente. Es mejor no traer todos los viejos fantasmas, no liberarlos. Es mejor dejarlos sentados allá…”ya has aguantado tanto tiempo, por que no puedes aguantar unos días más? Por qué crear perturbaciones? Por qué crear agitaciones innecesariamente?”.
…La represión crea al inconsciente. Cuanto más reprimido seas, mayor será tu inconsciente. Qué es en realidad el inconsciente? Él es aquella parte de tu mente que queda de lado, es aquella parte de tu casa donde nunca vas, el sótano. Tú vas tirando allí todo tipo de cosas y nunca vas allá. (…)
El inconsciente es una creación de la civilización. Cuanto más civilizado seas, más inconsciente serás. Si tú eres absolutamente civilizado, serás un robot, serás absolutamente inconsciente. Eso es lo que está sucediendo. Esta calamidad está sucediendo en todo el mundo. Eso tiene que parar. Y la única manera de parar eso es ayudar a las personas a traer hacia afuera sus inconscientes en las meditaciones….no pierdas esta oportunidad…Pero tú debes comenzar en este exacto momento a vivir conscientemente, Solamente entonces podrás morir conscientemente. Aunque consigas vivir conscientemente por pocos años, eso será lo suficiente. Aunque sea algunos meses o al menos algunos días, si la intensidad es grande, mismo algunos minutos serán suficientes para vivir conscientemente. Entonces, la persona se vuelve capaz de morir conscientemente. Y morir conscientemente es resucitar en una dimensión totalmente diferente, la dimensión de lo divino.
OSHO- The Guest
