Menu

No busques coherencia, busca totalidad

por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLD
Atualizado em 08/04/2020 11:35:06


Traducción de Silvana Partucci - [email protected]

Uno de los mayores equívocos cometidos por aquellos que viven dirigidos apenas por la razón es la insistencia en querer encontrar coherencia en todos los acontecimientos de la vida.

Ocurre que la vida no es coherente, no en el sentido en que nuestra racionalidad comprende el significado de esa palabra. La vida tiene sus propias leyes, su dinamismo pertenece a otra dimensión que no es la de la lógica humana.

Entonces, cuando intentamos encajarla en nuestros conceptos, nos parece caótica y sin sentido. La vida no tiene ninguna intención de crearnos problemas, ella simplemente transcurre como debe ser, nuestra mente es la que hace de cada acontecimiento un problema.

Y, a partir de ahí, genera angustia, ansiedad, miedo, infelicidad, un torrente de emociones negativas, que nos paraliza y hace que se vuelva imposible ver una salida.

Mientras no entendemos que el secreto es la total aceptación de cada situación -y el entendimiento de que todas ellas tiene como objetivo traernos algún aprendizaje-, seguiremos luchando contra el flujo natural de la existencia, en una tentativa en vano de hacer con que éste se amolde a nuestros deseos.

Vivir de manera total significa estar alerta, a cada momento, para intentar comprender la verdadera intención que se esconde por detrás de la aparente falta de sentido de todo lo que sucede en nuestra vida.

Entregarse con total confianza, con la seguridad de que lo divino siempre sabe lo que es mejor para nosotros, exige un cambio radical en nuestro patrón de consciencia. Por más difícil que sea, sin esta transformación será imposible experimentar la paz y la felicidad con que tanto soñamos.

."La vida es paradoxal y el Zen es un simple espejo-reflejo de la vida. Zen no es una filosofía. Las filosofías nunca son paradoxales, las filosofías son muy lógicas, porque filosofías son construcciones mentales. El hombre las hace. Estas son fabricadas por el hombre. Son hechas por el hombre, a medida, lógicamente organizadas, dispuestas cómodamente para que puedas creer en ellas.

Todas las partes que van contra la construcción fueron retiradas, erradicadas, descartadas. Las filosofías no reflejan la vida como tal, éstas son elegidas a partir de la vida. No son materias primas, son construcciones de la cultura.
El Zen es paradoxal porque no es una filosofía. El Zen no está preocupado con lo que es la vida. El Zen considera que todo debe ser reflejado como es. No se debe elegir, porque en el momento que elijes, se vuelve falso. La elección trae falta de verdad. No elijas, permanece sin elección y permanecerás fiel. El Zen no es una filosofía. El Zen es un espejo. Es un reflejo de lo que es.

Esta paradoja es la propia naturaleza en si, día y noche, verano e invierno, Dios y el Diablo están juntos. El Zen dice que Dios es bueno, entonces surge un problema después: ¿de dónde viene el mal?

Eso es lo que las religiones han hecho, cristianismo, islamismo, judaísmo, separan Dios del Diablo. El mal viene del diablo y todo lo bueno viene de Dios. Dios quiere el bien. ¿Pero de dónde viene el Diablo?

Entonces, ellos están en apuros y, finalmente, tienen que admitir que Dios creó al Diablo también. Si el Diablo también es creado por Dios, entonces, Dios permanece con la firma única de la existencia, entonces Dios continua siendo el único autor.

Entonces, todo lo que está sucediendo está sucediendo a través de Él, e Él es paradójico. Eso es lo que el Zen dice: Dios es paradójico, tan paradójico cuanto la propia existencia. Dios no es nada, sino otro nombre de la existencia, de la totalidad de la existencia.

Después de entender eso, la paradoja, un gran silencio surge en ti. El Zen trae mucha salud a la humanidad. Dice que eres ambos. Acepta ambos. No niegues, no hay elección, acepta ambos. Y en esta aceptación hay una trascendencia, es lo que es un hombre sagrado, ni bueno ni malo, o ambos. Cuando una persona es ambos, consciente de ambos, los opuestos se anulan.

Apenas intenta entender eso, es una de la llaves fundamentales. Cuando aceptas tanto lo bueno cuanto lo malo y no eliges, lo malo y lo bueno se anulan, lo negativo y lo positivo se anulan. De repente, hay silencio, no es ni bueno ni malo, es apenas existencia, sin juicio.

El Zen es no juicio. Es no condenación. Es no evaluación. Te da la libertad absoluta de ser."


OSHO. Zen: O Caminho do Paradoxo.


estamos online   Facebook   E-mail   Whatsapp

Gostou?   Sim   Não  
starstarstarstarstar Avaliação: 5 | Votos: 1


elisa
Elisabeth Cavalcante é Taróloga, Astróloga, Consultora de I Ching e Terapeuta Floral.
Atende em São Paulo e para agendar uma consulta, envie um email.
Conheça o I-Ching
Visite o Site do Autor

Saiba mais sobre você!
Descubra sobre STUM WORLD clicando aqui.

Deixe seus comentários:



Veja também

As opiniões expressas no artigo são de responsabilidade do autor. O Site não se responsabiliza por quaisquer prestações de serviços de terceiros.


 


Siga-nos:
                 


© Copyright 2000-2024 SomosTodosUM - O SEU SITE DE AUTOCONHECIMENTO. Todos os direitos reservados. Política de Privacidade - Site Parceiro do UOL Universa