¿Cómo crear una condición permanente de salud, paz, alegría y prosperidad en nuestra vida? ¿Es posible llevar a cabo esta tarea incluso en los momentos en que la realidad a nuestro alrededor nos parece claramente desfavorable?
Esta es, sin duda, una gran prueba que todo ser humano tiene como tarea afrontar en su existencia como espíritu encarnado. Aunque muchas veces las circunstancias nos desafíen, es preciso que tengamos como meta permanente manifestar esta energía positiva y luminosa.
La cuestión es que la expresión exterior de esa realidad se hace imposible si ella no se encuentra presente, ante todo, en nuestro interior. Y esto sólo podrá ocurrir si poseemos una profunda convicción acerca de la abundancia del Universo.
Mientras quede algún vestigio de duda o inseguridad en cuanto a nuestra condición de hijos bendecidos de la existencia, se hará difícil manifestar concretamente esta condición.
El principal paso en este camino es disolver la programación de creencias y convicciones negativas, que la mente insiste en cultivar por la persistencia en mantenernos atraillados a las experiencias negativas del pasado.
Estas memorias se mantienen constantes en nuestros pensamientos, alimentando el miedo, el cual nos paraliza. Por eso, el ejercicio para crear un nuevo programa de actitudes frente a la vida exige, sobre todo, coraje y perseverancia.
Por mucho que dudemos, la repetición permanente de afirmaciones positivas puede alterar el patrón habitual de nuestra mente, programándola con pensamientos, que poco a poco se convierten en una verdad también desde el punto de vista energético y emocional.
Sigue a continuación uno de esos ejercicios, que puede ser practicado cuantas veces sean necesarias, hasta que se convierta en una verdad profunda en nuestra mente.
"VÓRTICE DE LUZ
Soy un irresistible imán, y tengo fuerzas para atraer hacia mí todo lo que divinamente deseo, de acuerdo con los pensamientos, sentimientos e imágenes que constantemente alimento e irradio.
¡Soy el centro de mi universo!
Tengo fuerza para crear todo lo que deseo.
Atraigo a todo cuanto irradio.
Empiezo por elegir y mentalmente aceptar lo que hay de más elevado y mejor en la vida.
Ahora elijo y acepto salud, amor, abundancia, prosperidad y felicidad.
Ahora elijo prodigalidad y abundancia, para mí y para toda la humanidad.
Este es un universo rico y afable y yo acepto sus riquezas y su hospitalidad, ¡y voy a disfrutarlas ahora!" Amin Alves.
Publicado dia 4/8/2020 11:35:15 AM em STUM WORLD
