Para que podamos liberarnos de muchas de las angustias y ansiedades de las cuales somos victimas, es esencial que tomemos conciencia de los procesos que involucran la mente.
Siempre que algún deseo muy intenso es frustrado, ella inmediatamente nos lleva a sentir aquel acontecimiento como una verdadera tragedia. La intensidad del deseo es siempre determinada por el grado de sentimientos y emociones que involucra.
De modo general, los deseos ligados a nuestra afectividad, aquella dimensión de la vida en la cual acostumbramos depositar todas nuestras esperanzas de realización, son los que más fuertemente nos llevan a un estado de depresión e infelicidad.
Siempre que nos encontramos en esta situación, precisamos ser capaces de reflexionar, con toda la exención posible, por qué ponemos sobre el otro la responsabilidad de determinar nuestro valor.
Más allá de eso, es imprescindible no permitir que esta cuestión asuma una dimensión dramática, existencial, como si nuestra propia sobrevivencia estuviese amenazada por aquel acontecimiento.
El ego, aquella porción de nosotros que vive todo el tiempo dependiente de la aprobación por el mundo exterior, tiende a llevarnos a esta posición de victimas y poner siempre en el otro el papel de villano. Mientras tanto, precisamos recordar de que nadie puede, por mas que quiera, destruirnos o astillar nuestra seguridad, si no le damos ese poder.
Aprender a mantenerse alerta y conciente, de las propias virtudes y cualidades es el mejor medio para defendernos de las trampas en que la mente siempre insistirá en enredarnos. Una auto estima sólida es la llave para que nos blindemos contra cualquier forma de rechazo o frustración de nuestras expectativas.
Por que tomar todo tan en serio?
Mira hacia el espacio, mira para atrás, mira para adelante, mira para todas las dimensiones de las que tu eres, de las que es tu vida. Ella parece un sueño largo y todas las cosas que tomas tan en serio en este momento se vuelven inútiles en el próximo instante. Tú puedes ni acordarte de aquello.
Recuerda tu primer amor, como era de serio. La vida dependía de él. Ahora, absolutamente no lo recuerdas; lo has olvidado. Y de lo que pienses que tu vida depende hoy, será olvidado. La vida es un flujo, nada permanece. Ella es como una película pasando, todo se transforma en otra cosa. Pero, en el momento sientes el hecho muy seriamente y te perturba.
Publicado dia 6/5/2010 8:27:57 AM em STUM WORLD
